La experiencia que ha desarrollado por espacio de este año el entrenador barcelonés Lluis Planagumá en el Imabari, conjunto de la Tercera división japonesa, la J3 League, no ha resultado satisfactoria. Y todo, porque el equipo quedó en la séptima plaza con 55 unidades, a seis del Sagamihara: que es el conjunto que acabó consiguiendo la segunda y última plaza del ascenso y con el que precisamente perdió en la última jornada (1-2). Para la no consecución de este objetivo acabó resultando clave que el equipo que dirigía Planagumá no empezara excesivamente fuerte el campeonato: cuatro victorias en los diez primeros choques.
Cabe recordar que en enero pasado Planagumá se comprometió por una temporada con el FC Imabari, equipo cuyo presidente es Takeshi Okada, exjugador y exseleccionador nipón en los mundiales de 1998 y 2010. Y que así Planagumá se convirtió en la cabeza visible de un ambicioso proyecto de este club de reciente fundación que busca bael ascenso a la segunda categoría nacional, así como la construcción de una ciudad deportiva y la creación de una escuela de fútbol.
«Aquí la competición es un año natural: de marzo y a diciembre. El contrato es anual, estamos en J3, como la Segunda B española y el proyecto es ambicioso y con muchas aspiraciones. Nos dimos un año para ver la adaptación», explicó el técnico en AS en el mes de abril. Y ahora queda por ver qué es lo que sucede.